Puede que al plantearte hacer un currículum no hayas oído hablar de incluir un apartado llamado “objetivos profesionales“. Si es así, no te preocupes. No es algo inusual desconocerlo, lo que quiere decir que ahora tú partes con ventaja respecto a otros candidatos que se presenten al mismo proceso de selección que tú. Es una buena noticia, ¿verdad?
Este apartado o pequeña sección del currículum suele colocarse al inicio del mismo, y que sirve como una breve carta de presentación insertada en el currículum, que puede ser muy ventajosa para que las empresas se hagan una idea de lo que buscas al presentarte a este puesto de trabajo. Si lo redactas como es debido -enseguida veremos cómo hacerlo-, este apartado jugará a tu favor incrementando el interés de los responsables de selección por saber más de ti.
La posición de los objetivos profesionales en el currículum será justo a continuación de tus datos personales, que deben encabezar el mismo. Al redactarlos no emplearemos más de cinco líneas, ya que debe tratarse de un breve resumen de lo que buscas conseguir en tu futuro empleo.
Cuando acudas a una entrevista personal ya tendrás ocasión de explayarte en este aspecto. En el currículum trata de que sea una descripción concisa e inequívoca de tus aspiraciones profesionales, explicando por qué crees que esta oferta de trabajo a la que te presentas puede ayudarte a alcanzarlas.
Índice
¿En qué consisten los objetivos profesionales?
En la introducción hemos apuntado ya el concepto de los objetivos profesionales, y ahora vamos a concretar exactamente en qué consisten. Los objetivos profesionales en el currículum no son otra cosa que aquello que quieres conseguir en tu nuevo puesto de trabajo. Lógicamente se espera que tus objetivos profesionales estén en consonancia con el puesto al que aspiras: debes tener la formación adecuada que se pide, una experiencia profesional afín y unas habilidades que te hagan apto para desempeñar las funciones a cumplir.
De esto último se deduce que en los objetivos profesionales no debes limitarte a decir solo aquello que buscas en la empresa, si no lo que puedes aportar a la misma. Un proceso de selección no es una actividad unilateral: igual que tú esperas que la empresa que te seleccione te brinde una serie de reconocimientos por tu trabajo, la empresa también espera de ti una serie de aportes.
Por eso es importante que todo aquello que expreses en tus objetivos laborales lo tengas bien presente cuando llegue una posible entrevista de trabajo, pues te lo preguntarán sin duda, y querrán saber tanto qué esperas como qué puedes aportar.
Y si no te lo preguntan, saca tú el tema en cuanto veas la ocasión, para que comprueben que tienes claras tus metas y que te tomas muy en serio este puesto de trabajo y a la propia empresa.
Así pues, al expresar en el currículum tus objetivos profesionales debes considerar cuestiones como qué habilidades y competencias has adquirido hasta este punto, tu experiencia anterior, tus estudios y formación complementaria, además de cuál es tu interés en el puesto al que envías tu CV, qué esperas de la empresa que podría contratarte y que quieres aportarle si consigues el empleo.
En definitiva, los objetivos profesionales son la combinación entre tus aspiraciones con respecto al puesto de trabajo que se oferta y lo que la empresa busca en el candidato ideal. Esto último, lo que la empresa busca, deberás expresarlo indicando lo que puedes y estás dispuesto a ofrecer si consigues el puesto.
Al redactar tus objetivos laborales vas a tener que hacer una autoevaluación honesta para no transmitir unas metas que a priori sabes que no puedes o no tienes la capacidad de cumplir. Para ello, revisa muy bien tu experiencia, formación académica y aptitudes, así como la propia oferta de empleo que te interesa, y no infles tus objetivos en el CV, especialmente al indicar qué es lo que puedes aportar.
Y aunque debes ser consciente de que, por muy prometedores que sean tus objetivos profesionales, lo que realmente inclinará o no la balanza a tu favor serán otros apartados más amplios del currículum, no descuides jamás esta breve sección, porque todo suma. Y si tus objetivos van en la línea de lo que la empresa busca y tu historial formativo y profesional los confirma, puede que estés más cerca de la ansiada entrevista personal.
¿Cómo sacarle partido al objetivo profesional en tu currículum?
Si el apartado de objetivos profesionales está en tu currículum debe ser a tu servicio, no para que quede bonito. Y solo jugará a tu favor si sabes cómo sacarle provecho. A continuación veremos las pautas para conseguirlo.
En primer lugar, tu objetivo profesional debe adaptarse a la oferta a la que te inscribes. ¿Qué sentido tendría enviar tu currículum para un empleo puntual e indicar como objetivo profesional que esperas un trabajo estable y continuado? Ninguno, ¿verdad? Para evitar errores así resulta obvio que debes estudiar bien lo que se indica en la oferta de empleo.
Además de eso, analiza a qué se dedica la empresa, cuál es su filosofía de trabajo, su cultura empresarial y su historia. Estas cuestiones te darán pistas muy interesantes para poder plantear unos objetivos concretos que se ajusten a lo que la empresa quiere de ti, sin olvidar tu propio perfil profesional cuando redactes el currículum. Y si no consigues encontrar alguno de estos datos, guíate por el sector, el tipo de puesto o las competencias que se piden en la oferta de empleo.
Dar a conocer el objetivo profesional que se persigue es especialmente útil para los candidatos que no tienen demasiada experiencia, puesto que es una forma de compensar esa falta de recorrido laboral con unas aspiraciones concretas que transmitan ganas de trabajar, de aprender y de aplicar todas aquellas habilidades y conocimientos útiles para la empresa que se ha aprendido a lo largo del periodo de formación. Si es tu caso, no lo dudes: sigue nuestros consejos y que no falten los objetivos profesionales en tu currículum.
De hecho, esta es una de las utilidades más importantes de la sección de objetivos profesionales en el CV de cualquier candidato: expresar no solo nuestro potencial para el puesto y lo que nos gustaría obtener de él, sino también dejar patente nuestro compromiso profesional tanto con la vacante como con la empresa, que tendrá muy en cuenta este grado de compromiso.
Este aspecto es especialmente relevante en aquellos casos en que nuestro perfil no es el que mejor se ajusta al empleo en cuestión, ya que podremos indicar por qué nos interesa realmente, lo que estamos dispuestos a ofrecer y nuestros planes para aprender y crecer en la empresa de forma que nuestro perfil profesional llegue a encajar a la perfección en el del puesto a cubrir.
En definitiva, indicar el objetivo profesional en el CV es una manera realmente eficaz de poner el foco de los reclutadores en las razones por las que puedes ser un gran activo para su empresa, puesto que en un breve espacio habrás indicado tu conocimiento, habilidades y aptitudes para desempeñar el puesto de trabajo que quieren cubrir. Además, la sección de tu objetivo profesional les da a una idea de hasta qué punto tienes unas metas y tu determinación para alcanzarlas, lo que puede posicionarte por delante de otros candidatos en el proceso de selección.
Si eres estudiante, tienes más razones para poner estos objetivos profesionales
Consejos para redactar el objetivo profesional en tu currículum
Ya hemos comentado que para redactar nuestros objetivos profesionales de manera eficaz debemos tener en cuenta, por una parte, nuestro perfil, aptitudes y aspiraciones profesionales; y por otro, aquello que la empresa busca en un candidato a ocupar su vacante.
El mejor modo de conseguir combinar ambas vertientes es elaborar un listado con estas cuestiones que acabamos de describir y sumarle qué aspecto o aspectos te impulsan a presentarte a este proceso de selección y de qué manera puedes satisfacer aquello que te propones profesionalmente.
Ahora que ya tienes clara esta información vamos a explicar cómo incluirla en tu currículum vitae sin extenderte demasiado. Piensa que en un espacio de unas 5 líneas como máximo vas a hablar de tu interés en el puesto; la formación, conocimientos y experiencia que puedes aportar; tus puntos fuertes como activo para la empresa y los aspectos que crees que ésta te puede ofrecer a ti. Seguro que llegados a este punto te ha asaltado la siguiente pregunta: ¿cómo vas expresar todo eso en tan poco espacio y de manera coherente? Enseguida lo averiguaremos.
El primer punto importante es que tu objetivo profesional ha de estar adaptado a la oferta concreta a la que te presentas. No puedes redactarlo y enviar tu currículum con el mismo objetivo profesional a varias empresas, lo que sería un claro error puesto que tus objetivos profesionales dependen o están relacionados directamente con aquella empresa en la que quieres trabajar. Esto quiere decir también que si ya entregaste un currículum para una oferta de trabajo, tendrás que rehacer este punto (y seguramente revisar además el resto de secciones) para la nueva oferta a la que te inscribas.
No olvides tampoco que por muy ambiciosos que sean tus objetivos profesionales y te consideres capaz de ofrecer muchos valores a la empresa, jamás debes sonar pretencioso o arrogante, pues es algo que con probabilidad provocará rechazo en los reclutadores. Si hay un valor que se tiene en cuenta en un proceso de selección y que contrasta positivamente con el talento es sin duda la humildad. Así pues, asegúrate de transmitir adecuadamente tus capacidades y motivaciones teniendo los pies en la tierra, consciente de que siempre se puede seguir aprendiendo y mejorando.
Y ahora vamos a evidenciar algo que hemos dado a entender en varias ocasiones desde que hemos empezado a hablar de los objetivos profesionales: siempre que expreses aquello que te gustaría obtener de una empresa, transmite también qué te dispones a ofrecer a cambio. No hables solamente de ti, de lo que a ti te interesa de la empresa. Esto es en realidad un diálogo entre la empresa y tú, y en las conversaciones son importantes los intereses de todas las partes.
Por último y no menos importante, recuerda que tienes poco espacio en este apartado para transmitir lo que quieres, así que asegúrate de que los términos y expresiones que empleas estén cargados de significado y evita apostar por frases hechas y dichos muy trillados que ya suenan a tópicos en el currículum. Concreta al hablar de aquello que quieres y de lo que la empresa obtendrá por tu parte, sin perder de vista las particularidades del puesto, de la empresa misma y de tu propio perfil.
De esta manera tus objetivos reflejarán un punto de vista genuino y lleno de motivación: el entrante perfecto para que lean el resto de tu currículum con un buen sabor de boca.
Cómo destacar los objetivos laborales en el CV si eres abogado
Ejemplos de objetivo profesional para el CV
Aunque ahora vamos a ver ejemplos de objetivos profesionales a incluir en el currículum, es importante que no te quedes solo con ellos. Lo fundamental es que te sirvan como modelo y los hagas tuyos, adaptándolos como hemos dicho a tu propio perfil y a las particularidades de la oferta de empleo en cuestión.
Estos son algunos ejemplos de objetivos profesionales para un currículum con experiencia:
- “Contribuir a que la empresa alcance sus objetivos aportando mi experiencia y habilidades en el desempeño de mi cargo, teniendo la oportunidad de crecer profesionalmente cada día”.
- “Conseguir la estabilidad laboral en una empresa en la que pueda poner en práctica mis habilidades y conocimientos, con el fin de conseguir las metas propuestas y desempeñar mis funciones con eficiencia”.
- “Consolidar mi carrera profesional en una empresa que me ofrezca nuevos retos constantemente. Retos que poder superar aplicando mis aptitudes, sentido de la responsabilidad y capacidad de adaptación y motivación por aprender”.
Y si se trata de un currículum sin apenas experiencia profesional, objetivos como estos pueden ser muy adecuados:
- “Pasar a formar parte de una empresa en la que poder aplicar todos los conocimientos que he aprendido durante mis estudios, contribuyendo con ello tanto a mi evolución profesional como a alcanzar los objetivos planteados por la empresa”.
- “Poder desarrollar las aptitudes y conocimientos adquiridos en mis prácticas, aplicándolos a las estrategias reales de la empresa y formar parte así del equipo humano responsable de los éxitos obtenidos”.
Otros objetivos profesionales que deben aparecer en el CV si no tienes experiencia
Si sigues teniendo dudas para plasmar tus objetivos profesionales, consigue nuestras plantillas de currículum para descargar y verás como te resulta más fácil incluirlos en el espacio dedicado para ellos.