Generalmente, entregar el currículum vitae sin más, sin aportar ningún otro documento que rompa el hielo ante los reclutadores es un error, ya que corremos el riesgo de que nuestro currículo pase sin pena ni gloria entre el montón de documentos similares que otros candidatos han entregado también al igual que nosotros.
Porque no nos engañemos, tú vas a poner todo de tu parte para que tu currículum te abra las puertas del empleo que sueñas: incluirás tu experiencia más afín al mismo, utilizarás una estupenda plantilla descargable para crear tu currículum que le dará un acabado profesional y efectivo, e irás a entregarlo en mano para causar una gran impresión en tus reclutadores demostrando interés. Pero no serás la única persona que lo haga.
A estas alturas de la preparación de tu CV tu competencia se habrá reducido considerablemente porque muchos CV serán menos competentes en forma y contenido que el tuyo, pero aún te queda trabajo para que tu currículum tenga posibilidades: el siguiente paso es superar a otros currículums tan buenos y bien presentados como el tuyo.
La clave es destacar en lo personal, y esto lo conseguirás con la carta de motivación o carta de presentación, según el caso. Primero diferenciaremos ambas, para después darte unos consejos que te ayudarán a crear una carta de motivación perfecta para encontrar el empleo de tus sueños.
Índice
Consejos para redactar la carta de motivación perfecta
Una buena carta de motivación debe ser el complemento perfecto a tu currículum o, dicho de otro modo, el mejor representante de tu CV. Sí, porque lo que hará es presentarlo de la mejor forma posible ante quienes pueden contratarte. Para conseguir crearla de forma eficaz, sigue estos consejos:
- Su estructura debe constar de 3 partes bien diferenciadas:
- Introducción: en esta primera parte, hablarás brevemente de tu formación y experiencia profesional (si la tienes y puede aportar algo al nuevo empleo: algún trabajo de verano, prácticas anteriores, etc.).
- Desarrollo: explicarás qué te interesa del puesto y de la empresa, y qué eres capaz de ofrecer que te convierte en el mejor candidato
- Despedida. para finalizar, agradecerás la atención recibida y quedarás disponible para una entrevista personal.
- Dirígete a la persona encargada de leer tu currículum: averigua este dato en la página web de la empresa o llama por teléfono para preguntar por la persona responsable.
- Céntrate en aquello que es de interés para la empresa y olvida cualquier información accesoria.
- Redáctala con sinceridad intentando reflejar tu personalidad, siempre empleando un tono formal.
- Una vez la tengas redactada, repasa lo escrito hasta cerciorarte de que no has cometido ninguna falta de ortografía. Es fundamental cuidar este aspecto.
- Procura que su extensión sea de un folio a una sola cara. Si ocupa más, esta carta caerá en saco roto.
Diferencia entre la carta de motivación y la carta de presentación
En primer lugar, debemos diferenciar ambos tipos de carta, que en realidad son la misma cosa. ¿Cómo? Verás, una carta de motivación no es otra cosa que una carta de presentación que entregas junto con tu currículum cuando te postulas para unas prácticas, una beca de estudios o un primer empleo.
Es decir, la diferencia básica entre ambas la marca el tipo de candidatura con la que te aplicas a una oferta. Lógicamente, este dato influirá en cómo redactas la carta de motivación, pero el objetivo no es otro que conseguir captar la atención del reclutador y animarle a que lea tu currículum con una buena predisposición.
Así pues, si vas a entregar tu currículum con el objetivo de realizar unas prácticas o conseguir una beca para estudiar, la carta de motivación para unas prácticas es tu aliada impagable, incluso si el puesto que te interesa es tu primer empleo.
Con estos consejos tu carta de motivación estará lista para actuar como avanzadilla perfecta de tu currículum vitae. ¡Manos a la obra!