Elementos del formato de un currículum

El currículum es un documento que aglutina toda tu experiencia, formación, aptitudes y habilidades con el objetivo de conseguir el trabajo que deseas. Esa información forma parte de ti, pero a la hora de plasmarla al hacer tu CV debes darle una forma concreta para que sea legible, entendible y cause el mayor impacto positivo del que seas capaz. A esto lo llamamos darle formato al currículum.

En pocas palabras, se trata de que la información que viertes en tu CV quede representada de forma homogénea y coherente, tanto para ofrecer desde el principio una imagen profesional de ti como para lograr que lo lean de principio a fin y reparen en los aspectos fundamentales de tu historial, claves para que te llamen para concertar una entrevista.

No en vano, cuando un seleccionador se encuentra ante decenas de currículums ante sí, lo normal es que se guíe por unas pautas muy básicas para empezar a separar lo relevante de lo que no lo es, y una de estas pautas suele ser el formato: un CV en el que la información se lee sola suele esquivar la papelera si además su contenido es bueno. Porque además de trabajar el fondo, hay que cuidar la forma, ¿verdad?

Nuestras plantillas de currículum para rellenar te serán de especial ayuda en el asunto del formato, pues éste ya viene predefinido en ellas. Por eso, nuestro consejo en que confíes en nuestros diseños profesionales y te preocupes solamente del contenido y de que ese formato se mantenga a lo largo del documento.

De todos modos, incluso si utilizas una plantilla, debes conocer las pautas para dar formato a tu CV y adaptarlo así a tu situación concreta. A continuación las veremos todas.

Elementos que dan forma a tu CV

El esqueleto básico de un buen currículum es su estructura: el modo en que organizarás los contenidos, qué apartados incluirás y dónde los situarás en el documento. Esta estructura debe seguir un orden lógico, empezando por tus datos personales y siguiendo con tu formación, experiencia, aptitudes, etc.

Una vez definida, lo siguiente será encabezar cada sección con un título y destacarlo, emplear márgenes, seleccionar la tipografía que utilizarás y respetar el espacio entre los distintos elementos, todo con el fin de que cuando lo lean la información se presente de manera comprensible y bien diferenciada, no como una simple amalgama de datos sin orden ni concierto.

Una vez escogidos estos elementos de estilo, lo más importante es que los respetes a lo largo de todo el documento, porque si en un apartado utilizas unos márgenes pero en otro no los mantienes el resultado va a ser una chapuza. Es decir, emplear la coherencia. Lo mismo ocurre con la tipografía, que debes conservar de principio a fin. En aquellos casos en que un currículum utiliza distintas tipografías y márgenes debe hacerse siguiendo un criterio bien definido y respondiendo a una intención expositiva, no aleatoriamente. Y en cualquier caso es preferible que no abuses de una variedad de elementos distintos, o correrás el riesgo de acabar con un currículum farragoso y estrafalario en tus manos, algo que difícilmente te ayude en tu carrera.

Una vez más, una buena recomendación es echar mano de una de nuestras plantillas de CV para que partas del mejor formato desde el principio. De este modo te aseguras de que todos elementos mantienen una uniformidad a lo largo del currículum, y con el mejor diseño que puedas imaginar.

Consejos elementales para el formato del currículum

Vamos a repasar una serie de principios básicos para el formato de todo currículum, que necesitarás poner en práctica al preparar el tuyo.

En primer lugar, la tipografía que utilices es de vital importancia para que la lectura no resulte un calvario. Tipos de letra con muchas florituras o diseños barrocos están totalmente desaconsejados para un currículum; aquí menos es más. Fuentes como Arial, Verdana o Calibri son buenos ejemplos de tipografías aptas para un currículum. Y si hablamos del tamaño de la letra, 10 o 12 puntos sería la cifra ideal, tanto para que se lea sin forzar la vista como para que te quepa toda la información que quieres incluir.

Ahora piensa en el titular de una noticia. ¿Verdad que si es breve y vistoso te apetece leer la noticia completa? Pues con el currículum ocurre lo mismo: necesitas que cada apartado tenga un encabezado breve y atractivo que defina el contenido de esa sección. De esta forma quien lo lea sabrá moverse por el currículum sin dificultad y qué puede encontrar en cada apartado.

A continuación mantén las decisiones que has tomado en cuanto al resaltado de ciertos elementos mediante negritas, cursivas o subrayados: el tipo de información que resaltes de cierta manera en un apartado -nombres de instituciones, cargos, duración, etc.- debes resaltarlo del mismo modo en el resto.

Finalmente, en un currículum el texto debe estar siempre justificado, y has de cuidar los márgenes del documento: 2,5 cm en los márgenes superior e inferior y 3 cm a los lados son unas buenas medidas.

Cuando hayas hecho todo esto, relee el currículum un par de veces para asegurarte de que has respetado estas pautas. No es infrecuente en esta revisión detectar pequeños errores o descuidos en el formato que estás a tiempo de reparar. Es mejor hacerlo ahora que cuando hayas enviado el currículum, puesto que entonces ya no habrá nada que hacer y puede transmitir la imagen de alguien descuidado o poco observador que ni siquiera se ha tomado la molestia de revisar su propio currículum.

Tipos de formatos de CV y cómo escoger el tuyo

En cuanto al modo en que se presenta la información en el CV existen 3 grandes formatos de currículum distintos entre sí. A continuación te mostramos en qué consiste cada uno para que puedas escoger aquél que mejor se adapta a tu perfil.

Cronológico

Un currículum en formato cronológico es el que ordena la información de manera temporal, empezando por la experiencia y formación iniciales hasta llegar a las más recientes, o bien en sentido inverso, empezando por la experiencia y formación más recientes y terminando con las más antiguas. Es un formato útil cuando el candidato tiene un amplio historial laboral y le interesa destacar su experiencia por encima de sus habilidades.

Funcional

Se trata de un formato que destaca las habilidades y competencias y deja en segundo plano la experiencia profesional. Al contrario que el anterior, el formato de currículum funcional es ideal para candidatos sin mucha experiencia laboral o que acumulan etapas de inactividad laboral. Haciendo énfasis en las aptitudes y habilidades profesionales se consigue contrarrestar la falta de experiencia.

Combinado

El formato de currículum combinado o mixto conjuga los dos anteriores y muestra cronológicamente los anteriores trabajos y las habilidades adquiridas, siempre que estén relacionadas con el puesto vacante. Es un formato que se utiliza bastante para cambiar de sector profesional y también cuando la experiencia que posee el candidato es muy variada, lo que da buena cuenta de su versatilidad y capacidad de adaptación al cambio.

 

Seguro que ahora tienes más claro cuál de estos formatos es el más adecuado para ti; con ello te habrás ahorrado varias pruebas hasta encontrar el que mejor transmite tu perfil. Y no es algo sin importancia: muchos currículums fracasan estrepitosamente una y otra vez por utilizar un formato inadecuado para el perfil del candidato. Es simplemente una cuestión de forma, pero es que la forma en que te presentas ante los demás es de una importancia enorme. ¿Imaginas el efecto de entregar un currículum cuyo formato prioriza la experiencia pero cuyo candidato no posee experiencia laboral de relevancia? Es incongruente y deja en evidencia esa carencia sin apostar por otros factores que puedan nivelar la balanza, como serían las habilidades.

Formato de CV según tu perfil

Como acabamos de ver, cada perfil profesional requiere de un formato de CV concreto. La forma más sencilla de saber qué formato se adapta a la perfección a tu perfil es repasar las diferentes etapas de tu historial profesional y valorar cuál de ellas tiene más peso: ¿la formación?, ¿la experiencia?, ¿ambas? Y además de eso, ¿existen largos vacíos en tu vida laboral o por el contrario acumulas una experiencia sin apenas pausas entre empleos?

La respuesta a estas preguntas te permitirá identificar el formato de currículum idóneo para ti. De todas formas te será útil conocer cuál es el formato más adecuado para los tipos de perfil básicos:

Formato para estudiantes

Un formato ideal para un estudiante es el funcional, que posibilita al candidato mostrar sus habilidades y conocimientos en un momento de su vida en el que aún no cuenta con demasiada experiencia. Si por el contrario ya posee cierta experiencia laboral relacionada con el puesto, puede optar por el formato cronológico para destacar sus empleos anteriores, prácticas profesionales o proyectos personales relacionados con el empleo.

Formato para candidatos sin experiencia

En este caso en que no se dispone de experiencia previa el formato preferible es el combinado, que empleando un orden cronológico destaca las habilidades adquiridas por el candidato en trabajos anteriores no relacionados con el empleo al que opta actualmente, pero que pueden ser de mucha utilidad en la nueva empresa.

Formato para profesionales con amplia trayectoria

El formato cronológico se ajusta como un guante a un perfil que lleva a sus espaldas años de trabajo en un mismo empleo y/o sector, gracias a su capacidad para resaltar la trayectoria y evolución del candidato.

Formato para cambiar de sector profesional

Aunque en este caso se trate probablemente de un candidato con experiencia, lo más recomendable es valerse del formato funcional para destacar las habilidades que posee el aspirante al puesto, explicando cómo las adquirió. Aunque no fuese en empresas del mismo sector que aquella que realiza la selección, es muy posible que lo aprendido en ellas pueda aplicarse a ésta en gran medida.

 

A estas alturas seguro que ya sabes en qué formato de currículum encaja tu perfil, así que consigue uno de nuestros profesionales modelos de CV y da forma a tuyo para saltar al siguiente peldaño de tu carrera profesional.